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En el camino de las minas: historias de lugares, historias de personas



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Tipología: Vehicular
Temática: Cultura, Mina
Geografía: Colina
Dificultad: Fácil
Duración: Medio

Punto de partida: Pueblo de Ingurtosu.

La historia de Arbus está inextricablemente ligada a la historia de sus minas. El itinerario propone la visita de los dos complejos mineros principales de la zona, el pueblo de Ingurtosu y el pueblo de Montevecchio, ambos incluidos en el Geo-Parque Minero de Cerdeña. Estos lugares, un tiempo motores de la economía local, son ahora aldeas abandonadas, pero permanecen para contar las historias de personas vivieron y trabajaron aquí.

El pueblo de Ingurtosu, situado en el extremo del largo valle de "Is animas", funcionaba como centro administrativo de la mina de Ingurtosu y la mina Gennamari, de la que se extraía plomo, zinc y plata.

La primera investigación y explotación se inició a mediados del 800, pero la actividad minera (y con ella, la población del pueblo) alcanzaron su punto máximo a principios del siglo XX, tras la transferencia de la propiedad de las minas a la compañía Inglesa Pertusola Limited. Los implantes se mantuvieron funcionales hasta los años 70.

En el pueblo vale la pena visitar el palacio de la dirección, llamada "El Castillo", construido en 1870 en estilo neo-medieval situado  en una posición dominante en relación con las otras casas y la iglesia de Santa Bárbara. La iglesia fue encargada y financiada en parte por Lord Brassey, dueño de las minas, con el objetivo de crear un entorno social y moral más habitable para los mineros. Por fuera es especialmente impresionante el Viacrucis, construido en 1956 por voluntad de los habitantes de Ingurtosu; parte desde la iglesia y continúa a lo largo de un camino inmerso en la vegetación mediterránea, hasta un afloramiento rocoso natural del que se erigieron la cruces del Calvario.

A poca distancia de la iglesia se puede visitar la imponente estructura del Pozzo Gal (que se encuentra en el patio Harold), la cual estaba conectada por via ferrocarril al llamado Lavadero de Brassey, que se encuentra más abajo en el valle, consiste en un complejo de laverie (mecánico, magnético) y una planta de flotación de los minerales.

Hasta la fecha, el pozzo ha sido recuperado gracias a la intervención de la Alcaldía de Arbus, y alberga un museo multimedial que cuenta la historia de la minería, y la sede del CEAS Ingurtosu, el Centro de Educación Ambiental.

A lo largo de la carretera -no pavimentada- que conduce a Montevecchio, y dentro del patio de Telle, se encuentra otro maravilloso ejemplo de la recuperación de la arqueología minera, Pozzo Amsicora. Es un lugar muy importante para los sardos, porque representa una pieza significativa de la historia de la minería local, en particular, es un símbolo de las luchas que los mineros realizaron con la intención de salvaguardar sus derechos a trabajar para sí mismos y para las generaciones venideras. En 1991, como último intento de salvar su empleo, fue ocupada por los mineros que habían descendido al pozo y se alojaron durante unos 27 días. El 18 de mayo de 1991, el día en que los trabajadores pusieron fin a su ocupación, también se decretó el cierre definitivo de la mina que después de un siglo y medio cesó toda actividad.

Continuando hacia el norte, se llega al complejo minero de Montevecchio, situado entre las localidades de Guspini y Arbus. Montevecchio está dislocado a lo largo de dos áreas lamadas en Italiano: cantieri di Levante e cantieri di Ponente, incluyendo almacenes, plantas de lavado, pozos, casas de los mineros y empleados designados, al igual que edificios de carácter público y recreativo.

Aquí los huéspedes pueden visitar el sitio Piccalinna, la galería Anglosarda y el elegante edificio de la Dirección contiguo a la iglesia de Santa Bárbara, patrona de los mineros. Cerca del edificio de la Dirección se encuentra el Museo Mineralógico y La Foresteria, anteriormente destinados para conferencias y eventos culturales de ingenieros y gerentes de la mina; actualmente alberga una maravillosa colección de dioramas que reproducen la vida de la mina en varias ocasiones; El Museo Mineralógico, a su vez, posee una rica colección de minerales no sólo de la mina de Montevecchio, sino también de otras ciudades italianas y extranjeras.