El arte de la terracota en Cerdeña tiene orígenes muy antiguos: hallazgos prehistóricos confirman que ya en ese momento había una realización de utensilios de barro para uso común. Hoy en día, la antigua técnica de producción, formas y colores se han mantenido, pero los objetos humildes, que en el pasado ayudaban en las tareas de la vida cotidiana, son expuestos para embellecer las casas.
La antigua tradición se ha mantenido en el uso del torno, en la técnica de construcción del horno, en la aplicación de los esmaltes, en las herramientas que le permiten dar forma a la arcilla, en todo lo que es funcional para la creación de estos productos artísticos y originales.
Los talleres de artesanías realizan marigas (jarros, jarras) de todos los tamaños, prattus (platos), tassas (vasos), pingiadas (ollas y sartenes), ciccaras (vasos y tazas). Todas ellas herramientas trabajadas en el torno con arcillas locales más o menos purificados, cocidas en el horno después de haber sido revestidas con barniz en el cuello o incluso dentro toda la parte interior, como en el caso de sciveddas (recipientes).
Junto a la producción tradicional se ha extendido también la creación de objetos modernos para la casa realizados por los ceramistas que experimentan las técnicas innovadoras y decoraciones inspiradas en temas regionales como la Epoca Nurágica y pre-romana, el pan decorado, fauna local, etc ...